Después de una intensa lucha
LA FABRÍL DECLARADA PATRIMONIO HISTÓRICO CULTURAL
Jóvenes, vecinos y artistas juntaron miles de firmas para evitar su desmantelamiento. Ya se había comenzado con el derrumbe del silo para construir el barrio de la UPCP.
Esta semana, el gobernador de la Provincia, Jorge Milton Capitanich, declaró Patrimonio Histórico Cultural a la ex fábrica aceitera La Fabril Financiera, que se encuentra ubicada en el barrio La Liguria de la ciudad de Resistencia. Esta acción se realizó en respuesta al pedido efectuado por la Comisión Provincial de Patrimonio Cultural y Natural perteneciente al Instituto de Cultura.
Luego de evaluar los antecedentes del predio, la Comisión determinó que la Fabril “revistió una importancia trascendental en la vida económica y social del pueblo del Chaco”.
Con la emisión del decreto del Poder Ejecutivo, se cumplió con la antigua aspiración de la Comisión Vecinal del Barrio La Fabril, quienes desde 1998 expresan su preocupación por conservar ese espacio histórico.
Jóvenes, vecinos y artistas juntaron miles de firmas para evitar su desmantelamiento. Ya se había comenzado con el derrumbe del silo para construir el barrio de la UPCP.
Esta semana, el gobernador de la Provincia, Jorge Milton Capitanich, declaró Patrimonio Histórico Cultural a la ex fábrica aceitera La Fabril Financiera, que se encuentra ubicada en el barrio La Liguria de la ciudad de Resistencia. Esta acción se realizó en respuesta al pedido efectuado por la Comisión Provincial de Patrimonio Cultural y Natural perteneciente al Instituto de Cultura.
Luego de evaluar los antecedentes del predio, la Comisión determinó que la Fabril “revistió una importancia trascendental en la vida económica y social del pueblo del Chaco”.
Con la emisión del decreto del Poder Ejecutivo, se cumplió con la antigua aspiración de la Comisión Vecinal del Barrio La Fabril, quienes desde 1998 expresan su preocupación por conservar ese espacio histórico.
UN POCO DE HISTORIA
Fundado por el inmigrante italiano Juan Rossi en 1888, La Fabril funcionó como un aserradero, y luego como fábrica de aceites vegetales de tártago, maní y algodón. De esta manera se convirtió en pionera de esta producción.
En 1919 las instalaciones fueron adquiridas por la Compañía General de Fósforos y, al año siguiente por la Compañía General Fabril Financiera, lo que la llevó a ser una de las empresas industriales más importantes de la Región.
